lunes, 15 de noviembre de 2010
























Por los viajes que los mágicos aires nos regalaron, por los tropecientos besos que su piel me ofreció, por las palabras que quedaron selladas en mis labios por no rasgar el silencio.
Por tal cúmulo de sensaciones que en mis cinco sentidos despertaron, por cada pestañeo de sus ojos y por cada espera de mis labios justo antes de toparme con los suyos. Por todo eso le amé y por todo eso prefiero olvidarle.
















Y es que tiene carita de algodón, ojos de rayito de luna y huele a chocolate caliente. Ponme tus bracitos a modo de asa, que te beba poquito a poquito, dulce y calentita corriéndome por la garganta, despacito, quitándome las penas. Tiene también carita de gatito abandonado y sonrisa de ardilla traviesa, tiene magia en sus mejillas y con besitos de gnomo ella besa.

Señorita, labios de fresa: Déjeme ser su presa.























Por aquellas promesas que quedaron simplemente escritas, promesas que volaron junto a los ángeles y nos llenaron el corazón de felicidad y esperanza. Pero los hilos de estas promesas que poco a poco fuimos tejiendo se deshicieron con el tiempo, dejando nuestro mundo echo un tal vez, que puedo haber sido y no fue. Los pétalos de las mil rosas que te entregué marchitaron bajo la espesa niebla y fueron arrastrados por un sucio viento cargado de mentiras y podridas hojas de otoño. Tú y yo nunca nacimos para ser uno y ahora lo sé. Las lágrimas al principio dolieron, tan amargas como un punzón sobre mi pecho, pero me enseñaron a amar mi propio ser,me demostraron que esta vida solo es un camino lleno de baches, pero también nos muestra un hermoso prado de flores para elegir. Tiene flores de todo tipo, vivas amapolas, despiertos girasoles. pequeñas campanillas que alegraron mis días, incluso bellas rosas que resultaron esconder espinas.

No quiero más rosas de las que cuidar, porque tarde o temprano terminaran desgarrándome el alma. Fue bonito, una buena experiencia de la que aprender, pero siento decirte que tarde o temprano te agradezco tu adiós. Me hiciste abrir los ojos de una forma inmediata, similar a un par de bofetadas. Ahora se con que piedras no tropezar, ahora se de que pie cojeo. Que te vaya bonito, fue lindo el conocerte.

Smoking the pain

























El humo al menos conseguía regalarle una sensación similar al recorrido que él trazaba con sus manos en pecho. Ahora este lo hacía en su interior, en cada recoveco de su garganta, en sus pulmones, conseguía reventarle los bronquios en cada calada.
Por suerte a ella solo conseguía hacerle cosquillas. ya nada podía compararse al terrible dolor que le supuso que le arrancaran su intermitente órgano, su pequeño bombeante, ya desgastado: su remendado corazón.

jueves, 7 de octubre de 2010

Droga azucarada




Si pudiera explicarte exactamente que se siente...
Tú y yo somos diferentes, como día y noche, iguales, como dos gotas de agua, iguales como un reflejo.
En tus ojos veo noche, noche que me mece y acuna, noche oscura sin estrellas, que hipnotiza, que te invade en su oscuridad.

Déjame ser la luna que alumbre tu noche, la luna que te cante nanas al oido, la luna que dibuje estrellas en el firmamento de tus ojos.


Demasiado especial para comparara esto con amar a cualquiero otra persona.
Tú eres especial, como un chocolate caliente en un día de nieve, como el pañuelo que recoje mis lágrimas, como un
buena sábana en noches de miedo.
Tu cuerpo es pentagrama entre mis dedos, cada uno de tus lunares es una nota, un sentimiento, un recuerdo que al encontrarse con mis manos emiten un sonido,
un fragmento de nuestra propia melodía.
Somos sorpresa, ilusión y secreto.
Somos caricia y desgarro, somos la compenetración personificada.
Somos sonrisa, locura, confianza y aventura, la aventura de descubrir nuestros cuerpos mutuamente, la aventura de leer el deseo
en tus ojos.
Somos amistad, amor y pasión.
Somos la combinación perfecta, somos uno, somos libres como pez en el agua.
Déjame disolverme en ti, como azúcar en la leche, dejame mezclarme en ti, como dulce caramelo en tu lengua, dejame abrazarte y abrázame cual magdalena
esponjosa.
Déjame hacer de ti un festin de sabores, olores y sensaciones.
El mejor de los pasteles, el más azucarado.
Déjame que te coma, a besos, lametones y pequeños mordiscos que te hagan vibrar.

Quiero ser tu veneno y medicina, tu droga azucarada, tu insulina.
Quiero que tengas hambre de mi, que me tomes solo para tí y te des conmigo un empacho de besos.
Quiero que seamos como una noche loca, pero enterna, que al despertar no solo me encuentre tu olor en mis sábanas ni un te quiero en
tarjeta, quiero tu soleada sonrisa, quiero tus cosquillas mañaneras.


#Como un pequeño regalo, tan bonito, que es mejor no romper su brillante envoltorio.
Me faltan dedos para decirte cuanto te amo#

Rain.



Mi cielo ya no pinta perfecto, de aquel azul brillante que me cegaba.
Dibujo puntos con el dedo en mi cristal, pero cuando los intento unir, no significan nada.
La música suave que escucho en mi cabeza suena bajito, muy bajito, susurrándome cosas bonitas que no consigo entender.

Y camino con los dedos, en el frío mármol y me refugio, en cada esquina, en cada calle que tenga un hueco húmedo para mi. Y cuando creo que estoy a salvo, de la nada aparece un pequeño agujero, y termino empapada, llorando sin saber por qué.

Tal vez no estuviera llorando, tal vez solo fueron dos gotas que cayeron accidentalmente por mis mejillas.

Y me levanto, busco, busco y no encuentro, se hace de noche, y encuentro sonrisas en las farolas, en el rostro de la gente.Y con mis manos empapadas busco algo en mi cara, algo que necesito pero no encuentro, palpo mis labios pero no está, mi sonrisa se ha esfumado.
Quizás me la dejé en aquel rincón, tal vez resbaló cuando el agua rodó por mi rostro.
Por fin encuentro un pequeño escalón, justo cuando empieza a escampar, pero a mi eso ya me importa poco, estoy demasiado agotada.
Y cuando voy a quedarme dormida allí mismo encuentro a una pequeña amiga, escabullendose del peligro.
Entonces la tomo en mis manos y le pregunto:

-Pequeña hormiguita, ¿por qué yo no soy como los demás? ¿por qué yo soy diferente?
-Tal vez no seas tu la extraña, si no la gente, querida.

Se fue, no sin antes dejarme un pequeño cosquilleo en las manos.

Y soñé, soñé que la lluvia me manchaba los zapatos que nunca tuve, me los llenaba de colores y me mojaba el rostro de nuevo, me lo llenaba de sonrisas y la transparencia de las gotas de lluvia dejaron en mis ojos aquel brillo de antaño
Jump with me.



Bipolar, demente, extraña...
¿Qué más da?
Lo importante es que soy yo misma.
Y eso es lo que verdaderamente me importa.

sábado, 11 de septiembre de 2010

Cracks





Grietas en mis manos
lágrimas en tu piel
como dulces gotas de sangre
caen sobre este viejo papel.

Crueles gotas que quemaron
las palabras que tu pluma escribió
pues tus labios quedaron mudos
sin poder darme palabras de amor.

Que mis ojos ya no duermen
pues tu nombre me lo susurra el viento,
viento que congela mis manos,
duro, frío, desgarradamente lento.

Frío y gris en sus pupilas
quemadurás del mantel,
soledad que le cala hasta los huesos
ya sus lágrimas saben a miel.

Ausencia de brillo en sus pupilas
sus pestañas quieren caer
amargos le saben los días,
amargos, por culpa de una mala mujer.

Que tu pena llore mi viaje
viaje del que nunca más volveré
fiel amante nunca fuiste
lástima que ya no vuelva a caer.

Que mi perfume quede en tus ropas
que mi sonrisa quede en tu piel
menta clara y vainilla
llorarás deseando no oler.

Qué en tus sábanas perdure,
mi canela, en franela y café
sin tus labios quien me cure
de resaca estaré otra vez.

Que el cordel en tus dedos se enredede
delicado, que tu cuello, mi amado, rodeé
por mis manos sea guiado
tu muerte y la mía tal vez.

Baraja conmigo tus cartas
y preparame ese ultimo té
con sutiles gotas de cianuro
que juntos bebamos, por última vez.

Tú y tu odio simplemente consiguieron
hacerme cosquillas en los pies
pero al despertar de este mal sueño me percato,
ahora está todo del revés.

Que quizás te necesite
que quizás yo me fallé
acabando con tu frágil vida
pues la mia te llevaste también.


martes, 31 de agosto de 2010

Little love.



Si cada caricia de mis manos en tu rostro fuera aliento, que mis pulmones queden vacíos y mis labios enmudezcan insaciables.
Porque si tu rostro yaciera pálido y necesitado de cariño, mi último soplo de vida sería tuyo y si me pidieras un te quiero mis últimas palabras antes de abandonar este mundo serían tuyas.
Porque si murieras de sed , mis ojos quedarían secos para que al menos pudieras beber estas amargas lágrimas, aunque no sea lo mejor que puedan tomar tus labios.
Porque si me lo pidieras me amarraría a ti aunque las ataduras me hicieran llagas en la piel.
Porque las garras se vuelvan yemas y los desgarros en mi piel se vuelvan caricias en la tuya.
Porque el bocado más doloroso se convierta en el beso más dulce que yo pueda darte.
Porque me arrancaría la sonrisa y sujetada con chinchetas estaría para que simplemente vieras lo feliz que soy a tu lado, aunque simplemente no me hicieran falta.
Porque necesito que estés conmigo en esto y que lo nuestro sea como un deseo bien guardado en un bonito papel de plata cubierto de besos.
Porque quiero que me agarres de un dedo y no me sueltes, como hacen los bebés, antes de caer rendidos al más bonito de los sueños.
Porque quiero que me des la mano en todo momento, que me mires a los ojos y con cada beso que te regalo sepas que va mi vida entera en él, exclusivamente para ti.
Porque sin ti probablemente yo no tendría sentido ni la poca cordura que me queda.
Porque debes saber que cada centímetro de mi piel te pertenece y necesita.
Porque simplemente lo único que realmente necesito es que sepas lo mucho que te amo.



Little

Too tired.


Me cansé de ti, de que no me amaras, de que ni siquiera me miraras de verdad a los ojos mientras yo te daba la vida con ellos. Me cansé de respirar del humo de tus ropas, de beber el veneno en tu saliva y escupir la droga que me daban tus labios, que me hacia adicta a ti. Me cansé de darte amor hasta quedarme vacía, mientras que lo único que hacía era alimentarte el vicio. Me cansé de tu cara de poker cariño, por eso ahora te digo adiós.

Océano de lágrimas.



La tristeza enmudeció sus labios, más palabra alguna no conseguí oír de ella, congelados sus ojos yacían, en un aura de hielo macizo, deseando que tal llama de fuego los encontraran y derritieran aquella soledad que la mataba por dentro. Creo que solo oí su voz una vez, aunque tarareando algo con el viento, sutilmente entrecortada por el llanto, ronca de gritas en su garganta, desgastada cual textura del tronco de un árbol. Yo creo que siempre deseó ser escuchada, más ninguno de vosotros se atrevió a mirarla a los ojos como yo lo hice. Ahora vagará por un tal vez, ya casualmente desilachado y sin rumbo, qué se yo donde estará y si su pena habrá cesado o habrá muerto de ella. Pobre niña dulce, moribunda de cariño, anhelaba ser amada, ser querida, acariciada por unas yemas de unos dedos cuidadosos y atentos. Ahora tal vez baraje yo otra posibilidad en su existencia, puede que duerma mecida por el viejo viento de oriente, buscando un susurro, un aliento que le indique por donde deba seguir vagando. Recuerdo sus ojos grises, donde podía yo sumergirme horas y horas, como si de un océano frío y enorme se tratase, tan tristes que no encontré vida alguna, ni un pececillo, solo la enorme cantidad de agua que sus lágrimas habían acabado formando. Ahora no hay noche que consiga conciliar yo el sueño, pensando en ella, me preocupa el que será o el que seré yo algún día sin el océano de sus ojos, tal vez me asfixie en este vaso de agua, en esta urna de cristal.

Resignada a amar.


Color plata pinta sus ojos
para destacar entre las miradas
y el carmin de sus labios
esconden una sonrisa desganada.

Ya no le quedan chichetas para sostenerla.

Llamativas prendas luce
y con buena fe siempre sale
despues de una caida más,
después de que sus ropas quedaran echas retales.

Como maldicion de los infiernos
lo lleva clavado en el pecho
nacido del diablo parece
y tras la oscura melena que le crece
sonrisa de poker siempre usa,
con ella te pica , cual medusa
que en su tela de araña te enredas
hasta que finalmente atrapada te quedas.

Ya sean divinos tus ojos,
o deslumbrarte tu sonrisa
que ningun caso le presta a tus encantos
y como hormiga indefensa te pisa.

Enferma de cansancio se encuentra
para el ella solo es polvo que se esfuma,
poca cosa le parece
cual tabaco al viento que se fuma.

Y despues de otra derrota
despues de otro tiempo transcurrido
pobre incredula llega a casa,
rota y con el corazon malerido.

De oscuro pinta sus labios secos
con carbon negro de luto,
sedientos de un nuevo beso
desde aquel último, que bien le supo.
Carbon negro cuales cabellos le cuelgan,
que a su pobre diablo siempre le recuerdan.

Con una guitarra vieja
siempre ella es comparada
rotas ya están las cuerdas
de sus costillas desgarradas.

Lo unico valioso que comparar
son sus curvas de mujer
pues hueca la dejaron cual guitarra
pues su corazon nunca le quiso devolver.

Aun asi conserva el aliento
pues un amor secreto posee
y aunque la aman dando la vida
solo tiene ojos para el.

Se esfuerza en escupir el veneno
que un dia le dió a beber
para por fin entregarse a los brazos
de su pobre amante fiel.

Y aunque a los otros brazos corriera
y nunca les faltara el querer
siempre un secreto serian
y de lo suyo nadie podria saber
porque en pecado se amaron
cual maldicion le seguia a la pobre mujer
que llorandole a la luna
sola por siempre se quiso ver.

Ella nunca supo rimar , simplemente nació para amar.

Alma descosida
busca dulces manos costureras
para reparar un pobre corazón roto
que atentamente le espera.


Colour Paradise



Apenas aprendí a conocí las múltiples texturas que la vida me mostró salí a la calle.
Había esperado aquel día tanto tiempo, tantas ansias, tanta ilusión.
Y cuando salí, de aquel sitio oscuro y abrí los ojos...
Las motas de polvo que cubrían mis ropas se desprendieron de ellas y volaron, en un soplo mágico,
como si de desnudar dientes de león se tratase.
Me descalcé de mis pequeños zapatos de charol, me puse de puntillas y por primera vez abrí los ojos, quería sentirme por todo lo alto
cuando descubriera el mundo real.
Pero entonces todo se volvió gris de nuevo.
Aquel mundo no era tal y como yo lo había imaginado.
No sentí el aroma de la felicidad , los colores.
Sentí la desilusión,y por primera vez, dos lágrimas color plata rodaron por mis mejillas.
Y yo creyendo que el mundo era tal y como en mis dibujos.
Aquello tenía una ausencia de color enorme.
Y yo no iva a permitirlo.
Volví a la puerta y entré de nuevo, rauda y veloz, cogí mis temperas y muchos cubos de agua, unos 7 y cuando terminé de ponerlos fuera
eché un color en cada uno.
Entonces cogí la brocha grande, y pinté el aire, pr
imero de rojo, de rojo pasión, como el color de los labios de las señoras mayores, ese tan bonito y perfilado.
Me horroricé al principio, pues quedé salpicada de rojo, mi blanca camisa, mis pequeñas piernas y manos,
y mi imaginación voló por mal camino.
Pero me reí de mi propia estupidez y continué.
Cogí el naranja mandarina, y pinté la hierba, mi nariz y pinté el cielo.
A continuación cogí el amarillo, y pinté las nubes, pinté la mitad de la casa de madera, pinté los arándanos y pinté a las hormigas.
Algo más ilusionada y pringada de pintura de varios colores continué con el verde.
Coloreé los ojos de las personas, mis manos, el tronco de los arboles, las ventanas y las piedras, todas ellas de un verde limón precioso.
Cogí el azul, mi preferido, mi azul cielo, pinté las sonrisas y corregí las muecas tristes de todo aquel que vi.
Luego cogí el morado al que usé en el sol
, para darle un tono más oscuro y diferente.
Por último cogí el rosa , pinté todos los cristales de las tiendas, las campanas de la iglesia, corrí tras las mariposas, los grillos, incluso las golondrinas quedaron inmaculadamente rosadas.

Y cuando terminé, miré aquel mundo lleno de manchas de colores, unos colores cambiados sí, pero a mi me gustaban.
Creí que mamá me echaría una buena bronca, pero para mi asombro encontré a mama, con el pelo verde, la sonrisa azul marino y los pies naranjas.
Fue tan cómico y divertido verla así
que al mirarla a sus ojos morados comprendí que a ella también le había encantado mi invento.

Entonces cuando las doradas nubes empezaron a bañarnos a todos los colores, agua cristalina que lo borró todo y un río de colores
corrió calle abajo llevándoselo todo, mezclando los diferentes tonos, llevándose todo aquel arco iris tan maravarilloso.
Entonces, cuando mi trabajo quedó echo trizas, me fui a casa y me escondí entre mis sábanas, mis suaves sábanas blancas.
A la mañana siguiente me levanté de
la cama con los ojos cerrados y a tientas.
Llamé a mamá entusiasmada y le pedí un pequeño favor.
Una a una, con tal delicadeza, tan y como se lo pedí.
Mamá me pintó las pestañas de colores, rojas, naranjas, amarillas, verdes, azules, moradas y rosas.
Todas juntas y mezcladas.
Y cuando me abrió la puerta empapada aún, pues la lluvia no cesaba, agarré mi paraguas blanco, y abrí los ojos.

Fue entonces cuando una felicidad enorme recorrió mi cara y todo mi cuerpo, aquel nuevo invento funcionaba de verdad.
Ya no había lluvia que borrara mi sueño, porque para mis ojos la lluvia era ahora de colores, y lo empapaba todo, coloreandolo todo a su gusto.


Y reí, y salte. bajo aquel paraguas blanco, ahora empapado de felicidad.


Cuando los colores se te acaben y lo veas todo negro, haz como yo, pintate las pestañas y vive tu propio sueño tal y como tú quieras verlo.

Jaulas de humo

Anhelo ser algo especial en la vida, algo más que una mota en tus ojos, algo más que una piedra en tu camino. Mientras tanto me consumo en esta bolsa de aire, de un espero humo negro que no me deja ver más allá de lo plastificado, más allá de lo real.

Absurda ilusión me ronda la mente, poder yo romper con una simple aguja esta urna , esta jaula de frío hielo, este barullo de cuerdas que atan mis manos, estos hilos que pretenden volverme marioneta.


Poseer yo, absurda mortal , tal aguja mágica capaz de explotar, romper mi espejo de realidad expulsar todo ese humo, y que fuera de toda esta cárcel deje de ser veneno lo que respire, si no brillante polvo de hadas.

Abrir mis ojos, mi alma, mi espíritu. Salir de puntillas, sin hacer ruido. Poder sentir la magia en mis pulmones. Expulsarla en un aliento embrujado y sonreír como nunca lo hice.
Desenreda mis hilos, que mi alma nació para ser libre, como una oscura golondrina al viento, como un pez en su hábitat de origen.

Quítate tú también la venda que te apaga los párpados, que te esconde lo prohibido. Tal vez sea lo realmente fantástico, lo que te queda por descubrir, tu última pieza, llámalo como quieras

Desatémosnos los cordones, descalcémonos por los escalones, corramos por ciudades, playas, ríos, orillas y manantiales, sintamos el frío, el miedo de caminar entre fuego, entre oscuridad, la felicidad de poseer una vieja orilla solo para nosotros, una única vida, una nueva oportunidad a la que nos abrimos paso.

Volemos , saltemos, entre nubes de algodón, de azúcar trenzada, rodemos colina abajo, descubramos juntos que estamos echos del mismo material.
Puedo ver reflejada en tus ojos la curiosidad, puedo respirar tus ansias por descubrir, de arender nuevas cosas que amar, que odiar, nuevos motivos por los que llorar y sonreiír.

Juntos somos uno, juntos somos persona, imagen, dibujo, somos acción y movimiento, somos amor y odio al mismo tiempo.

Deja que la hierba te haga cosquillas en los pies y no te aguantes, sonríe, riamos a carcajadas juntos, atrapa los rayos del sol con las manos, regalame tu bonita sonrisa.

Ayudame a pintar mi mundo de amarillos, de púrpuras brillantes y de amarillos verdosos.
Déjame pintar tu rostro de rosas pálidos, de sonrisas enormes que desgarren tus labios, de lágrimas que desborden tus párpados.

Pinta conmigo un mundo de acuarelas, de agua, de nubes de colores. Acaricia mis pestañas con las tuyas, puedo ver el brillo en tus ojos, la ilusión en tu vida. Mírame y cumple este deseo: Ámame como yo te amo, pero no olvides esto otro: nunca dejes de soñar, ni por mi, mi por nadie ni nada, que nada pueda cortarte las alas, que nadie nunca pueda borrarte la sonrisa.

miércoles, 7 de julio de 2010

Evangeline


Allá donde el cielo termina y la tierra comienza, allá por el viejo molino , donde se respira aire limpio y no existen las impurezas, allá donde el arroyo refresca y el sol hace dorar los ojos de las ardillas, allá, en aquel lugar, nací yo.
Corría por los pardos caminos y tarareaba el soniquete de mi caña entre las vallas de la casa de la lechera.
Recuerdo sus ojos color aguamarina, sus mejillas sonrojadas y su naricilla repleta de pecas.
Pero lo que más me gustaba de ella eran sus trenzas rojizas, del mismo color que sus labios, tales capaces de esconder la más hermosa de las sonrisas.

Algunas mañanas íbamos al prado, pues nos encantaba ordeñar las vacas del abuelo y bebernos la leche calentita y dulce.

Por la tarde corríamos hasta nuestra cabaña donde teníamos una pizarra vieja muy grande, donde inventamos mil y una historias fantásticas.

Recuerdo que adoraba las noches en las que el abuelo nos contaba historias de miedo en la buhardilla, mientras nosotras nos escurríamos entre las sábanas muertas de miedo.

Me fascinaba Evangeline en todos los

sentidos, desde su carita risueña hasta la musicalidad de sus cuerdas vocales con las que solía cantarme nanas.

Algunas mañanas me despertaba con la melodía de su armónica, pues siempre estuvo orgullosa de cada canción que la abuelo le enseñó a tocar.

Una mañana temprano Evangeline me llamó, me dijo que iría a recoger frutas bajo las verdes hojas del bosque, se fue y nunca más supe de ella.


Recorrí sin aliento cada rincón del bosque , cada piedra, cada gota de rocío en la que pudiera reflejarse, cada copo de nieve caída y no conseguí encontrarla.

Dos días después de su desaparición fui a la casa de la tía Agatha con el abuelo. La tía Agatha siempre me pareció igual de vieja y aburrida. Entonces me escapé de aquel lugar, pidiéndole permiso al abuelo con una mirada traviesa.

Corrí y corrí desde la vieja casa de la tía, atravesé bosques enteros, rodé colinas abajo, salté entre los pedruscos del riachuelo e incluso trepé algunos árboles para encontrar lo que necesitaba, para ser feliz de nuevo, mi querida Evangeline.


Te juro que no sé cuantas zancadas di por aquellas montañas, ni sabía donde o qué tenía que hacer, solo sé que vagué sin rumbo hasta ponerse el sol y que llevaba los ojos llorosos de la velocidad y el sufrimiento, acompañadas de rasguños en las manos. Acabé con el vestido hecho harapos.

Serían las mil de la noche cuando me paré a descansar en aquel lago donde Evangeline y yo solíamos chapotear cuando el calor apuraba nuestras ropas en días calurosos de verano.


Me tumbé sobre unas rocas cerca del agua y pensé que el abuelo estaría preocupado por mí. Cerré los ojos, sonreí y dejé de preocuparme. Por muy lejos que yo estuviera de casa el abuelo siempre sabía donde encontrarme.


Miré hacia el agua turbia y ví cómo la luna se reflejaba en ella. Observé su reflejo con atención, aquella noche parecía que la luna sangraba.


Entonces seguí el rastro de la sangre y comprendí que no era sangre de luna, si no que había un cadáver en el agua.

Me levanté espantada y vi como tres arándanos flotaban en el agua. El cuerpo de Evangeline flotaba entre las frutas, tenía el rostro más pálido de los normal y ya no podía distinguir entre el rojo de sus cabellos y el de su sangre.


Me lancé al agua y recuperé sus ropas y me quedé con uno de sus cabellos.


No recuerdo mucho más de aquella horrible noche.


Desperté en casa del abuelo, abrazada al vestido empapado. Miré por la ventana y el aire de las montañas ya no era el mismo.


El día estaba nublado, aun así , algo me mantenía viva a pesar de mi trsiteza. Bajé con el abuelo a desayunar, había preparado churros. Cuando terminé , abrí la puerta y la brisa me sacudió las mejillas. Escuché una risa traviesa y vi algo que corría por detrás de casa.


Miré al suelo y vi un rastro de arándanos esparccidos por la hierba.

Seguí el rastro de las frutas que conducían a nuestra vieja cabaña.

En la puerta vieja, que con esfuerzo nos hizo el abuelo, estaba la cesta de Evangeline colgada, la abrí y encontré su armónica, la miré con lágrimas en los ojos y en su reverso encontré una frase grabada, en letras doradas, esa frase que nunca olvidaré : "Siempre contigo"

"She is the one that I adore"
(Bittersweet- Apocalyptica.)











domingo, 6 de junio de 2010



"Ojala pudiera darle al "PAUSE" a mi vida en momentos como este"



Lloras, le lloras al tiempo.
Lloras, le lloras a la nada, al vacío, sin importante de que el tiempo siga transcurriendo y complete su curso hasta tu trágico final.
La arena cae, lenta y veloz, al menos veloz para tus ojos, veloz, como polvo de hadas que acuna tus alas.
Resbala adormecida por un embudo de sentimientos y sueños mezclados, ilusiones.
No tiembles, no llores, porque ya es demasiado tarde para tachar los errores, porque ya la gravedad está haciendo de las suyas.
Llora, desgarra las pieles aterciopeladas del alba, enrredate en los cabellos, entre las ramas de la noche, escapa con furia y desesperacion, pues ya poco te queda que hacer.
Observa como el ultimo grano de arena resbala por el cristal, como la sangre entre tus labios rugosos, como las palabras entre tus dedos inexpertos.

Cayó.
Un gemido.
Dolor.

Nota tu piel, su lamento, entre susurros de viento.
No más, no sufras.
Ahora su espíritu es libre.
Ahora debes buscar un nuevo sendero hacia tu felicidad.

lunes, 24 de mayo de 2010


Bajo los últimos rayos del día llego,
el susurro del viento es la banda sonora de mi vida
y mis pasos, el compás de la vieja melodía.
La música acaricia mis oídos, envolviéndome en un aura que me acuna, pero a pesar de la tentación de dormirme entre mis pasos, me esfuerzo por abrir los ojos y mirar al cielo, pues él me marca la hora, me dice que el momento está cerca.
Llego a la estación, llena de gente, prisas y extress, más no me importa el tumulto y el ruido.
Busco una puerta al exterior y encuentro un hueco seco y aislado, al borde de las vías,
fuera de la visión de la gente.
La noche estira sus brazos y poco a poco le va arrebatando el cielo al día, tornándose oscuro, inmaculado de estrellas.
Son las doce y bajo mi rincón puedo observar la luna, hoy, perfectamente esférica.
La gente se ha ido, la estación ha quedado totalmente vacía.
Me apoyo en un pequeño muro e intento sumergirme en mis pensamientos.
El tren está cerca, lo noto entre la niebla, mis pulmones respiran el carbón de sus chimeneas y noto sus chirridos entre las vías.
Justo cuando estoy a punto de caer en un profundo sueño una luz brillante me ciega y obliga
a mis párpados a abrirse, está aquí, ha llegado, viene a por mi.
-Bienvenido al Nerverland Express-
"Dí un respingo y con prisas recojí mis cosas.
Las puertas estában abiertas para mí, me estában esperando.
Cuando entré en aquel vagón moté como podía respirar diferentes sentimientos en el aire.
Estaba algo vacío, sus únicos pasajeros eran niños, mayoritariamente pequeños.
Vestían sus delicados pijamas y entre sus manitas les acompañaba su fiel compañero de juegos.
Me percaté entonces de que podrían haberse escapado de sus casas, pues en todos ellos
pude notar una sensación de soledad y la tristeza yacía en sus ojos.
El siguiente vagón estaba algo más lleno.
En el viajaban personas muy ancianas, pero en sus rostros, al contrario de los niños, podía saborear la tranquilidad y una profunda paz interior.
Alguien me contó una vez, que Neverland es el lugar más especial de la tierra, es sumamente perfecto y los que viajan alguna vez allí en su vida, vuelven a sus hogares felices, libres de todos los problemas a los que antes estaban atados.
Entonces, sumida yo en mis pensamientos de nuevo, el tiempo voló como el polvo y el tren paró de forma inesperada.
Las puertas se abrieron y todos los niños salieron al exterior corriendo , con una nueva expresion de felicidad en sus caritas.
Me asomé a la puerta con curiosidad y cuando mis pies pisaron aquel lugar una brisa sacudió alegremente mis cabellos, trayendome un olor marino, que me resultó muy familiar, como aquellos domingos de playa en familia.
Entonces todo ocurrió muy rápido y vi toda mi infancia en un segundo.
La primera vez que abrí los ojos, mi primera sonrisa, mi primer juguete, mis primeros pasos, mi primer diente, la primera vez que monte en bicicleta, todo mi mundo, mi vida , allí, en un segundo.
Al recordarlo, mi visión se nubló al instante y no conseguí recordar nada más, solo sé que fue el lugar más bello que vieron mis ojos."
Despierto de nuevo en la estación, aunque ahora es de día. Me he percatado rápidamente de que no he dormido sola, pues estoy rodeada de todos los niños del vagón, que casualmente acaban también de despertarse.
Al mirarnos todos a los ojos, se nos ha escapado una sonrisa. Acabamos de comprender que todos hemos soñado lo mismo, pues nuestras miradas han descubierto que la tristeza ya no habita en nuestros corazones.
A continuación he notado la ausencia de los muchos ancianos del segundo vagón y he pensado que quizás han preferido quedarse en Neverland para siempre. Esto me entristece un poco, pero a la vez me alegro por ellos porque Neverland es el mejor lugar donde podrían estar.
Finalmente pienso que cada vez que me sienta mal me esforzaré en recordar tal maravilloso lugar y justo cuando me doy por vencida e intento convencerme de que solo fué un sueño demasiado bonito, me llega de nuevo ese olor marino tan familiar, que curiosamente, procede de mis ropas.
-Waiting for my Neverland Express-

sábado, 15 de mayo de 2010

Bansha ~~




La hija del sol la llaman, entre sus muchos nombres adquiridos, por su piel tostada y sus ojos color madera.

Contaban los necios, que fue fruto de la tierra y el sol y amamantada por los pechos de las verdes colinas.
Respira hierba, decían, conoce los secretos del bosque, más puede comunicarse con los animales, después de compartir media vida con ellos.

La encuentran entren las calles, curiosa, explorando las diferentes texturas, olores y sonidos que la rodean.
De noche la llaman la niña de las lágrimas de plata, pues por los tejados se le ha visto, respirando noche, y entre las tejas tararea su nana, echa un ovillo entre sus brazos, para cobijarse del frío.

Dicen que espera su "Príncipe Luna", pues parece que a la luna le canta, y con los ojos llorosos se duerme entre susurros en idiomas desconocidos.

Y en la mañana clara, bajo los primeros rayos del día, sus ojos color madera cambian, torciéndose a un tono ámbar, casi felino, por eso es llamada ante los ojos del día como la niña de los ojos de tigre.

Cuentan las viejas leyendas, que en las noches de luna llena, la niña permanece despierta, contemplando la luna, alza la voz y canta su dulce nana para todo el pueblo, dejando a todo humano existente dormido en el acto. Pocas criaturas consiguen permanecer despiertas , escuchando tal triste melodía. Sus ojos se desvanecen en el brillo puro de la luna, tornándose a un gris transparente, de un color nunca visto por el ser humano, ojos capaces de embrujar a todo aquel que se reflejen en ellos.

Nunca fueron vistos por el hombre, pero se han visto gatos, aves y algunos insectos siguiéndola, hipnotizados por sus ojos y sus largos cabellos.

Sabios de todo el mundo estudiaron su leyenda y persona, incluso intentaron descifrar su nana, reflejada en el canto de los pájaros, más ninguno obtuvo resultado con sentido, dando su caso por perdido.

Aún puedes verla, envuelta en su aura de salvaje belleza, pues curiosamente nunca envejece,
recorriendo caminos y pueblos, bajo puentes y cerca de riachuelos, con una manada de animales tras ella.

Los que la conocen la llaman bruja, y después de mucho observarla descubrieron su nombre, pues tatuado en sus finas muñecas lo lleva, Bansha, que en su idioma, tal vez desconocido significa "Embrujo de Luna".



Posdata: Es curioso, pero encontré la foto justo después de escribir el texto, que por cierto es totalmente inventado.

¿Casualidad? Si, bonita casualidad.


 

Agua



Agua, el agua es mi medio de vida.
Agua es mi segundo nombre, el agua corre por mis venas.

Sobrevivo con agua en pequeñas cantidades, pero siempre me ahogo, siempre necesito más.

Nací con alma de pez para ser libre en mi entorno. El agua es vida, es la madre que acoje entre sus brazos a miles de seres vivos, es un medio mágico donde podemos flotar, una tierra inversa, algo así como volar, movernos a nuestro antojo.

En ella se esconden criaturas bellísimas, nuevas texturas, nuevas sensaciones. En cada gota hay un secreto, el aliento de un pez, la gota que sacia a una flor, incluso el agua de unos ojos azules, color cielo, color agua.
Pero no por ser mas imprescindible para la tierra es más bella que ésta, pues la tierra también esconde mil y una maravillas, nuevos colores.

Cuando agua y tierra se juntan, forman el barro, conocidamente como algo asqueroso,sucio, repugnante.
Pero el hombre fue creado del barro, al igual que la mujer, moldeado en perfecta armonía de los elementos y cocido a fuego lento, al sol de un nuevo día.

De esta forma nació un nuevo elemento inerte, llamado cuerpo. La carne es fuerte pero inservible sin el alma.

El alma mueve el cuerpo, expresa los sentimientos. El alma es todo, pero aparentemente nada, pues no es visible.

Cuando cuerpo y alma se unen, forman la persona, un ser inteligente y curioso.

Cuando dos almas gemelas se encuentran y se entrelazan por esa cosa, tal vez mágica, a la que llamamos amor, funden sus cuerpos y el alma se convierte en una.


De esta forma, una caricia se vuelve ilusión, un beso , tal vez en sueño, y una mirada, una sonrisa.

La persona nace con un regalo entre los dedos, la vida, algo que debemos cuidar a conciencia.

A medida que pasa el tiempo, (un elemento sabio e incontrolable) la persona envejece,entristece, muere y se hace polvo.

El secreto de la vida se encuentra al final del camino, un misterio que ni mil estudios del hombre podrán resolver.

Pero recuerda, la vida no se mide por cada segundo que respiramos, si no por los momentos que nos dejan sin aliento ...


 

Nunca me saques de este sueño por favor ~~




Cuando estoy contigo las palabras sobran con una sola mirada y la tristeza no existe en mi vocabulario.

Cuando estoy contigo puedes ver la felicidad en mis ojos, cuando tu me besas el suelo se derrumba bajo mis pies y tus labios me ciegan de todo lo que no seas tú.

Pero cuando te vas, cuando me das ese ultimo beso tan amargo, esa ultima caricia, ese último roce entre tus dedos, ese calor, ese sabor, perduran en mi piel y en mi boca unos segundos, pero al final siempre se van, produciéndome una horrible sensación de soledad.

Y no estoy sola, lo sé, pero es que cuando digo que sin ti no soy nada no miento, cuando sigo mi camino sin ti, me siento muy pequeña y se forman dentro de mi garganta y de mi estómago unos nudos enormes que me encogen el corazón y me impiden llorar frente a tus ojos, justo antes de que te vayas.

Pero la música consigue romper esos nudos y las lágrimas se escapan de mis ojos y estas hacen que me retuerza de dolor.

Creí que podía amar hasta un límite, pero he descubierto que mi amor por ti lo ha sobrepasado y ahora este límite no tiene fin.



¿Sabes qué?




Te amo, mi dulce locura.


 



I miss you baby

Tengo un frío horrible en el cuerpo...
No sé cuántos kilómetros nos separan.
No tengo ni idea de cuando volveré a verte...
Solo sé que mi cuerpo empieza a fallecer si no estoy a tu lado.

Me vuelvo absolutamente insoportable.
No duermo, no como, ni siquiera estoy segura de si respiro, mi cuerpo permanece en piloto automático. Pero realmente no estoy viva, solo soy materia inerte.
Te necesito...

Es como quitarse la sed con cualquier cosa, pero sigues estando sediento, porque lo único que de verdad necesitas es agua...

Es como vivir sin sentido, sin rumbo, como estar muerto en vida...
Me muero de sueño, pero nunca consigo dormirme...
Tu aroma empieza a desvanecerse, a desprenderse de mis sábanas.
Cierro los ojos e intento recordarte, pero tu rostro se ha esfumado de mis recuerdos.
No quiero seguir con esto, no tiene sentido.
Busco entre mis cosas, algo que me lleve al ansiado final.
Cerillas, podría morir entre llamas...
No, no quiero otro calor que no sea el de tu cuerpo.

El filo de mi navaja me da la solución. Recorre por mi piel un intenso dolor. Las pocas gotas de calor que contenían mis venas, ahora rebosan por mi cuello.

Mi vista empieza a nublarse, no veo nada.

Mis cuerdas vocales se desgarran entre gritos de silencio.
El "tic tac "llegó a su fin.
Ahora si siento realmente ese frío, tan solo unos segundos.

Espera, ya casi no puedo sentir nada.



Sleep, my princess.



Frío, tiempo, distancia.



Mi corazón nació dentro de un cubo de hielo.
El hielo pretendía protegerlo pero lo único que conseguía era debilitarlo aún más.
El frío era su jaula, una jaula horrible que lo consumía y lo cegaba, lleno de rencor y miseria y sobre todo de soledad, oscura y fría soledad.

Y un día en el que ya no le veía sentido a esta vida, llegaste, y con una caricia fundiste aquel hielo que yo no había podido destruir en años.

Ahora late con sentido, con un destino, ahora late por algo, sincero, enamorado.
Y es que un beso tuyo acaba con todo el odio que se puede retener en toda una vida, el roce de nuestra piel, me produce una sonrisa involuntaria y tu voz es como un pequeño rayo de sol que me despierta dulcemente entre las sábanas de una mañana cálida.

El tiempo es nuestro peor enemigo y cuando se agota, este nos tortura, separándonos desde nuestros adentros, desde nuestra conciencia, aunque nuestros labios no quieran separarse, aunque nuestra piel se aferre a la del otro, el tiempo y la mente nos separan, aunque el corazón llore de rabia desde lo más profundo de nosotros.

La distancia es su aliada y juntos quieren volver a enredarnos entre las ramas del hielo, separándonos, ahogándonos en nuestro propio llanto.

No soy nada sin ti, no me dejes sola frente al frío, salvame. No dejes que el tiempo y la distancia nos gane, nunca lo consientas, nuestro amor siempre será más fuerte.

I miss you baby.

Je t'aime.


 

Mi pequeña confesión..




Hoy quiero decirte, aquí, en mi pequeño rincón vacío que
no me salen las palabras, pues palabras no hacen falta para que veas la felicidad en mis ojos.
Decirte, que hay algo en ti, algo que he descubierto, que nunca había llegado a conocer hasta ahora.
Decirte, que nunca había sentido esto. Nunca el roce de algo me había producido tal placer, tal calor, tanta sensación de bienestar.
Decirte , que quiero perderme en el roce de tus mejillas, con solo las llemas de mis dedos.
Decirte, que cada momento contigo, es como una gota de miel, que cae despistada entre mis labios, produciéndome tal locura que nunca había conocido..
Decirte que no me creo esto..
Decirte que me he enamorado de ti.. Y esta vez de verdad.
Decirte desde el más profundo y sincero de mis sentimientos.. que quiero pasar el resto de mi vida contigo.
Decirte que rezo porque esto se cumpla...
Decirte que ahora mi vida es tuya...

Decirte... que decirte.. si ya lo sabes.




Te quiero.


 

El fruto del pecado.

Habitábamos tu y yo
en un paraíso perfecto
lleno de flores exóticas,
árboles frutales
y manjares de buen aspecto.

Convivian con nosotros
los animales más bellos,
más el sol nos alumbraba
regalándonos sus destellos.

Manantiales,lagos y cascadas
nos ofrecían sus aguas cristalinas
y en la noche contemplábamos el firmamento
llenos de estrellas de purpurina.

Perfecto era,
perfecto parecía
y curiosos descubríamos
cosas nuevas cada día.

Hasta el día en que el diablo
el pecado nos mostró,
tentándonos con la manzana,
la fruta de la pasión
y con su lengua de serpiente
nos mostró la tentación.

Los ángeles nos advertían
que el fruto no tocáramos
pero con cada advertencia de ellos
más curiosidad mostrábamos.

Y en una noche oscura
en secreto decidimos pecar
y espurriéndonos entre arbustos
al fruto fuimos a probar.

Su dulce gusto me dejó
la máxima lujuria en la boca
y esa noche descubrí
lo mucho que me provocas.

La lujuria nos cegó
controlando nuestras manos
y bajo el cielo que Él creó
sentimos lo mucho que nos amamos.

El castigo fue horrible
del edén fuimos desterrados
conocimos el mundo cruel
e inmortales nos quedamos.

Pero no dejé de sonreír
a pesar de lo pasado
pues contigo es mi edén

 

Snow



Un día desperté en un lugar donde nunca antes había estado.
Abrí los ojos con dificultad, había demasiada luz.

Estaba acurrucada a mi misma. Tenía el cuerpo empapado y los dientes me castañeaban involuntariamente.
Me rodeaba una densa capa de nieve.
Mis huesos era incapaces de moverse , ni siquiera un milímetro de donde estaban situados.

Aquel lugar empezó a oscurecerse, sentí miedo. Entonces cerré los ojos, sintiéndome protegida en mi misma y más tarde, sumergiendome en un profundo sueño.

" Un bosque. Claro, verde, infinitamente bello.

Las extensas raíces de los árboles abrazaban nuestros cuerpos.
El día nos había regalado una perfecta alfombra de hierba fresca.
Tu mirada observaba mi rostro, contemplando cada detalle minúsculo de este. Yo seguía tus pupilas con mis ojos, muy concentrada.

Tus manos tallaban en mi cuerpo un camino, lento y perfecto.
La suave brisa nos traía el dulce olor de las frutas recogidas.

La naturaleza nos preparó una exquisita melodía del bosque, un conjunto de cantos de aves, grillos y otros insectos.

Me sentía en perfecta armonía: Tu cuerpo, el mío..
Éramos uno.

Las prendas sobraban en aquel momento, el calor nos invitaba a que nos las quitáramos.

La mirada de ambos yacía cansada, recorriendo nuestros cuerpos.
La respiracion , al compás de las miradas seguía cansada, entrecortada.

Poco a poco, entre besos y sonrisas juguetonas, la seda quedó a otro lado, tirada en la hierba.
Y entonces el sol nos mostró mutuamente tal y como realmente éramos , en cuerpo y alma."

En ese momento tan exquisito desperté, dejandome el sueño una sonrisa permanente en el rostro. Mi cuerpo empezó a sentir calor y mis dedos ganaron movilidad. Me sentía bien. La nieve que me rodeaba se había derretido, dejando a mi alrededor la forma de un corazón perfecto. Entonces , feliz me levanté y sacudiéndome mis ropas , emprendí camino de regreso a casa.

~[La gente llama a esto tener buen corazón, otros lo llaman ser la persona más gilipollas del mundo. Yo lo llamo... querer a alguien demasiado.]~

Ti amo mio amore~~

Te quiero.. tanto.. tanto...

No sabes como te amo.
Tu para mi el edén.
Mi única tentación, mi mayor debilidad.
Eres mi marca perfecta de heroína.
Un día me diste a probarla.
Ahora vivo por y para ella.
Solo tengo una cosa en la mente: Tú,tú,tú y solo tú.
Sueño con mirarte a los ojos, sueño con que vuelvas a regalarme una caricia, esa caricia que me hace temblar.

Sueño con que me susurres algo al oído, dejando que
tu voz mezca mi cuerpo.
El aire me sabe vacío sin ti, nada tiene sentido.
Miro a mi alrededor,nada vale la pena para seguir abriendo los ojos.
Me acurruco en mi misma, esperando a que me salves de esta tristeza que me consume, esta tristeza que siempre intento esconderte.

La voz del pecado


Èl es la tentación en persona,


señor de la noche.

Dulce poeta enamorado,
las musas no traen su inspiración, pues él inspira a las musas.

Las enamora con su canto,
una mirada,
una sonrisa
y todas caen rendidas.

Él lleva la miel en sus labios,
dulce miel de mi perdición.

Manos atentas tiene,
sus caricias producen escalofríos.

Oscura voz melancólica
con la que recita bellas melodías.

Llora penas a su damisela,
que lleva su corazón de un hilo colgando,
canta nanas para ella,
bajo el árbol de su balcón,
llorando
y no duerme pidiéndole a Dios
la suave caricia de su amada,
la que esconde en sueños
bajo su almohada,
la que quita el sueño
al pobre juglar.

-Mi dulce locura-

 

The vicious lover of the darkness

Diablos de la noche, salid de vuestra guarida, mi cuerpo,
vuestro recóndito escondite.
Salid de lo más oscuro de mi mente y apoderaros de ella.
Hacedla vuestra y luchad contra ese órgano inútil al que llaman corazón.
Haced de mi, la amante más oscura y perversa que pueda existir.
Controlen mis manos, mis labios, conviertanlos en máquinas de amar perfectas.
Acabad con cualquier estúpido remordimiento y no hagáis caso al pequeño ser que os aconseja desde mi corazón malherido: la conciencia.
Cieguen mis ojos, mi alma, desvelad mi cuerpo ante la luz de la luna y entonces..
todo habrá empezado.

Todo serán caricias y besos prohibidos que por siempre negaré haberlos dado,
pues ciega ante todo estaré.
Solo noche, penumbra, sombras que se funden entre ellas,
deseo y placer.

Aunque en el fondo para mi, todo sea dolor..



♥En 1924 un medico llamado Fransua Boasent enumeró una a una todas las anomalías físicas y mentales que se producen cuando una persona se enamora.
Al principio, afirmaba Boasent, el enamoramiento tiene numerosas simil

itudes con procesos gripales, estado febril, dilatación de pupilas, palpitaciones, sudoración temperatura alta y disminución de pensamiento periférico.
El mal de amores cursa los primeros días como un catarro pero a lo bestia, hasta que el paciente se habitúa a la presencia de la persona amada, después los síntomas, en lugar de remitir como sucede en los procesos gripales, se multiplican. El enamorado pierde el apetito, pasa las noches en vela con gran ansiedad y se entrega al aislamiento y a la soledad, y aunque el paciente sabe lo que le está pasando, no hay antibiótico ni antigripal que le alivie, la vida sin la persona amada se convierte entonces en un infierno.
En función del organismo afectado, su periodo de recuperación puede ser de unos días o convertirse en una enfermedad crónica, un desasosiego para toda la vida.

Necesidad



Después de todo, no es tan difícil vivir con esto, me digo a mi misma.
Sinceramente, se que me estoy engañando.
Cada milímetro que me separa de ti es un infierno.
Me ahogo, el aire no me llega a los pulmones, se escapa entre mis heridas.
Tus besos son mi cura.
Cierro los ojos y creo que aun puedo notar el tacto de tu piel en mis manos.
Tu aroma . Estoy empezando a olvidarlo y eso me hace sentir aun peor, te siento aun más lejos.
Son dificiles de olvidar, tus pupilas observandome, contemplando cada detalle de mi
rostro acompañado de una sonrisa. Una sonrisa rodeada por esos labios , tan sumamente perfectos.
Olvidar, que palabra tan dura.
Olvidarte no podría jamás.
El aire suena hueco sin tus abrazos.
Las lágrimas parecen que empiezan a congelarse, pues todo es frío sin ti.
La sensación de calor es tan grande contigo, que no podría describir en este momento otro lugar mas agradable que tus brazos.
Cierro los ojos. Me imagino entre ellos. Milésimas de calor.
Olvidé la sensación, otra vez te necesito.
Frío, ahora lo empiezo a notar de nuevo..

Je t'aime.